Yo por el contrario pienso que lo que están haciendo los gobiernos de Occidente -que van de demócratas y progresistas- es una muestra garrafal de su incompetencia abismal. Y que haciendo ver que nos salvan, nos están hundiendo. Si no saben gobernar en tiempos difíciles, que dejen paso a quienes entienden que no se salva una vida jodiendo mil vidas. Tampoco es tan difícil.
Sobre la barbaridad que están haciendo con la cultura manteniendo cines y teatros cerrados, prohibiendo actividades y conciertos, he publicado en el diario ARA Cultura: No volem caritat sinó dignitat.