"Esta pasión lo había absorbido por entero, apenas comía, ya no dormía, pero soñaba noches y días enteros con su idea fija: los libros."
GUSTAVE FLAUBERT, Bibliomanía

domingo, 22 de diciembre de 2013

238. TAMARA DE LEMICKA EN "WONDERWOMEN" (15)

 
Altamente aristocrática en sus maneras y, por qué no decirlo, algo esnob. Eso fue la pintora TAMARA DE LEMPICKA, apodada "la baronesa del pincel", aficionada a la cocaína y capaz de buscar sexo de madrugada en las oscuras orillas del Sena en los años de entreguerras. Sobre ella departo con Rosa Gil en "Wonderwomen", de Ràdio 4 (Emisión: 19/12/2013; minuto 20). Escuchar aquí.

"Gran admiradora del arte italiano del Renacimiento, recorría cada año los museos de la bella Italia para admirar sus tesoros pictóricos y allí conoció a gentes de muy alto nivel, entre ellos a Gabrielle D’Annunzio, con quien vivió un episodio de atracción fatal del que dieron testimonio unas cartas que, cuando salieron a la luz, a Lempicka no le hicieron ninguna gracia. Aunque D’Annunzio le regaló un inmenso topacio que lució siempre en la mano izquierda y no se cansaba de repetir su procedencia. Ignorada por muchos, como por ejemplo Peggy Guggenheim, que jamás la apreció como pintora, su narcisismo le llevó a ser amiga de otro gran narciso, Andy Warhol, y entre sus coleccionistas recientes hallamos renombrados artistas como Barbra Streisand y Madonna."