Tiene la particularidad de que me permite hablar de mi ciudad, esa ciudad que a pasos agigantados se ha ido convirtiendo en un lugar incómodo, sucio, contaminado hasta la náusea a base de humos y ruidos, muchos ruidos (!!!!!). Una Barcelona que deja mucho que desar y que no es, ni de lejos, la que quiero que sea.
Aquí la entrevista.