Pero la historia de Carol no nació ayer, sino que se gestó hace años en la imaginación de la novelista norteamericana PATRICIA HIGHSMITH, una de esas autoras de lectura también obligada y que no sólo escribió El talento de Mr. Ripley, aunque estuvo muy bien que lo hiciera.
A propósito de Carol he escrito Patricia Highsmith y el amor entre mujeres, publicado por El País.
"Las fotos del exilio suizo de la escritora Patricia Highsmith (1921-1995) la muestran cejijunta y rodeada de gatos. En esos últimos años vivió recluida en una aldea de apenas doscientas almas, amenizando las horas con la lectura del Herald Tribune. Era la misma autora que en 1952 había visto censurada por sus propios editores la novela Carol, un canto a las relaciones lésbicas que ella misma practicó. Se vio obligada a publicarla bajo pseudónimo, Claire Morgan, y con el título de El precio de la sal [...]".