lunes, 21 de diciembre de 2009

14. LAS MUJERES Y LOS DÍAS



Un buen día me decidí a traducir al gran poeta catalán GABRIEL FERRATER (Reus 1922-Sant Cugat del Vallès 1972) sin que nadie me lo pidiera. De vez en cuando la vocación tiene esas cosas y lleva a rozar la imprudencia.
Sudé la camiseta e incluso tuve que encerrarme un tiempo en la CASA DEL TRADUCTOR, en Tarazona, pero lo conseguí. Sus poemas habían sido traducidos con anterioridad ni más ni menos que por JOSÉ AGUSTÍN GOYTISOLO, PERE GIMFERRER, JOSÉ MARÍA VALVERDE, JOAN MARGARIT y PERE ROVIRA; queda confirmada pues la temeridad de la empresa. Pero como no existía un volumen que incluyera su poesía completa, me pareció una necesidad.
Su hermano JOAN FERRATÉ (sin "r" por elección propia) aprobó mi trabajo y ESTHER TUSQUETS accedió a publicarlo en la colección de LUMEN que en su día creara mi amigo JOSÉ BATLLÓ, librero entrañable y autor de unos libritos de aforismos geniales. El prólogo es de LUIS IZQUIERDO.
Cuesta elegir un poema de Ferrater; en mi versión al castellano, ahí va uno no demasiado conocido:

EL PONIENTE EXCESIVO

Este sol que menstrúa no se quiere poner.
Mira la loca roja cómo rechaza
la sábana de montaña que la abriga.
Otro día exagerado. Otro
día se te muere creyendo que su color
no volverá nunca más, no volverá
como la sangre que se pudre. Seca la luz,
tira algodones de nubes, lávate, gírate,
bebe el más límpido gin de luna y mar.